martes, 31 de agosto de 2010

DIFERENTES CIENCIAS DE LA FILOSOFÍA

Hay que advertir, sin embargo, que virtud se dice en varios sentidos. En efecto, la virtud propiamente dicha es la moral, siendo la intelectual virtud relativamente. Y si esto sucede con la virtud, también con la educación, que existe en función de aquélla; así será más educación ayudar al educando a formarse moral que intelectualmente. Educación es, por tanto, un concepto análogo fundamentado en los diferentes sentidos de virtud, siendo el primer analogado el que significa la formación moral.

Encontramos, pues, en la educación distintos niveles de finalidad: la virtud moral, la virtud especulativa y la virtud artística. Sucede como en los diversos grados de captación formal propios de las ciencias teóricas; de ahí que podamos hablar asimismo de diferentes ciencias de la educación, las cuales no son especies particulares dentro de un género común, sino que se constituyen en función de su ordenación a una finalidad más o menos perfecta. Así, la ciencia que estudie la educación en su acepción más propia será una Pedagogía moral; deberá pertenecer, por tanto, a la Filosofía moral, al pretender ayudar a ordenar los actos de la voluntad. Le seguirá la Pedagogía especulativa, que tendrá como fin la virtud intelectual especulativa; al promover la ordenación de los actos cognoscitivos podremos decir que se integra en la Lógica. Por último tendremos la Pedagogía técnica, claramente ubicada en el ámbito de las mismas Artes a las que sirve.

Esta diversificación no quita valor a los nombres dados anteriormente para todas estas ciencias en común, aunque habrá que entenderlos entonces como términos análogos, igual que los de ciencia o de filosofía. De este modo, el de Filosofía de la educación convendrá sobre todo a la Pedagogía moral, que se da en el ámbito de la asimismo llamada Filosofía moral, lo que no impide que también se use para la Pedagogía especulativa y la técnica. A la hora, entonces, de escoger una expresión para referirnos habitualmente al saber sobre la educación lo haremos tomando la más rica y sugerente, pues "la denominación se toma de lo mejor"; y ésta será la de Filosofía de la educación.

El reconocimiento de una Filosofía de la educación, así como la diferenciación jerarquizada entre una Pedagogía moral, otra especulativa y otra artística, nos parece una cuestión de suma importancia. El actual descrédito generalizado de la Filosofía en general y la hegemonía del positivismo científico han ocasionado, sin embargo, que la Pedagogía pierda raigambre filosófica, con lo que ello supone de ordenación a la virtud y a la perfección del hombre; en su lugar dicho saber se ha visto reducido al de una ciencia de lo cuantificable o de lo observable en el proceso educativo.

LA PEDAGOGÍA FILOSÓFICA EN RELACIÓN CON LA ÉTICA

Tras integrar las diversas ciencias pedagógicas en la Filosofía moral, en la Lógica y en el conjunto de las Artes, respectivamente, parece necesario hacer nuevas precisiones. En primer lugar en referencia a la relación entre Filosofía de la educación y Ética. Esta última es la ciencia de los actos voluntarios según su ordenación al bien; y como el bien máximo del hombre es su felicidad, éste se constituye en el fin último buscado por dicho saber. La Filosofía de la educación también pretende que los actos voluntarios estén ordenados al bien, pero de un modo particular. De entrada, la atención del saber pedagógico no se dirige hacia cualquier acto voluntario, sino hacia los del educador, por los que se ayuda al educando a crecer moralmente. La materialidad del objeto de estudio de ambas ciencias no es, pues, la misma: una se ocupa de todo acto voluntario, la otra exclusivamente de los actos del educador y del educando -los cuales, por supuesto, son voluntarios-.

La delimitación más particular del objeto material de la Filosofía de la educación permitiría hacer de ésta una mera parte subjetiva de la Ética, cuyo objeto material es más genérico; sucedería como cuando hablamos de una Ética familiar, profesional o política. Mas hay que decir que también difieren en lo formal. La Ética trata, en efecto, de los actos voluntarios en su moralidad u ordenación al bien. La Filosofía de la educación lo hace, por el contrario, en su educabilidad u ordenación a satisfacer una determinada necesidad, la de llegar a ser capaz de obrar virtuosamente. Por ello no se pretende en este caso la felicidad, sino una mayoría de edad moral en la que estar bien dispuesto para ir a la zaga de aquélla.

Esta subordinación de la educabilidad a la moralidad, en la que halla sentido, permite entender sin embargo que ambas formalidades no son del todo distintas. No es, en efecto, una subordinación extrínseca, tal que la educabilidad se ordene indirectamente a lo moral. Eso sucedería si la educación fuera una mera técnica; y no es así, como luego veremos con detenimiento. Por el contrario, todo acto educativo encuentra su calificación moral en su misma finalidad, en tanto que educativo, y no sólo en cuanto que acto voluntario; y es que no se dice que alguien eduque si enseña correctamente a robar, por ejemplo. La subordinación de la educación a la vida moral es, en consecuencia, intrínseca; decir entonces que educar es, en cuanto tal, una acción moral implica en el término una analogía de proporcionalidad propia, y no de atribución extrínseca.

Por todo ello, afirmamos que el saber pedagógico no es una parte subjetiva de la Ética, pues difieren en el grado de formalidad, pero tampoco una parte potencial, al convenir proporcionalmente ambas formalidades. Dicho saber no queda de este modo fuera de la Filosofía moral, sino que es una de sus partes integrales. Éstas son, según define el Aquinate, "aquellos elementos necesarios para el acto perfecto de la misma"; y la educación es ciertamente imprescindible para la vida moral, pues "en las cosas que caen bajo el ámbito de la prudencia, nadie se basta a sí mismo". Por eso Santo Tomás considera que es parte integral de la prudencia la virtud educativa del maestro: "La prudencia, que es preceptiva, parece propia más bien de los maestros, llamados también preceptores". Y también la docilidad del discípulo: "Se da también, como hemos probado, en los súbditos a cuya prudencia corresponde la docilidad".

De la misma manera, pues, concluimos que podemos considerar a la Filosofía de la educación como una parte integral de la Ética. Tal es la importancia del saber pedagógico, sin el cual la ciencia moral adolece de uno de sus auxiliares principales, aquel que inicia al hombre en su caminar hacia la felicidad.

LA PEDAGOGÍA FILOSÓFICA EN RELACIÓN CON LA LÓGICA

Con todo lo anterior tenemos ya mucho ganado para nuestra reflexión sobre la relación de la Filosofía de la educación y la Lógica. Cuando el fin de la educación no es la virtud moral sino la intelectual especulativa, entonces dijimos que el saber pedagógico pasa a integrarse en la llamada por Santo Tomás Filosofía racional, esto es, en la Lógica. Ésta ordena los actos cognoscitivos en aras a conocer la verdad; por ello, aun siendo un arte dado su carácter práctico productivo, es por su finalidad teorética un arte especulativo o liberal.

La Pedagogía especulativa trata de ordenar los actos del educador para ayudar al educando, nuevamente, en su indigencia. En la medida en que no sea capaz de aprender por sí mismo -inventio-, se hace necesario recibir el auxilio -disciplina- del maestro. Nos volvemos a encontrar con un saber subordinado a otro, necesario el primero para la perfecta realización del segundo. Y la formalidad bajo la que ordenan los conocimientos no es exactamente la misma, pues dirigir la razón hasta el conocimiento de la verdad difiere del prepararla hasta poder buscar por sí misma aquella verdad. Mas no son tampoco del todo diferentes, y así no se dice que enseñe quien conduce a otro por el error, del mismo modo que no es virtud intelectual el conocimiento falso. Se trata, de nuevo, de una parte integral, no subjetiva ni potencial, del arte especulativo de la Lógica.

Y es por ello que el arte de enseñar la verdad encuentra su fundamento en el arte de descubrir la verdad, como tan acertadamente afirma el Aquinate: "El que enseña lleva a otro al conocimiento de lo que ignora siguiendo un proceso similar al que uno emplea para descubrir por sí mismo lo que ignora". La Lógica de la investigación se convierte, pues, en el modelo de la Lógica de la enseñanza, aunque ésta sea luego ayuda firme para quien inicia la andadura de la ciencia y aún no se ve capaz de descubrir la verdad por sí mismo. Educar en la verdad es, así, un ejercicio de Lógica en su acepción más rica.

LA PEDAGOGÍA FILOSÓFICA EN RELACIÓN CON LAS ARTES

Cuando el fin de la educación es la virtud artística entonces, según ya afirmamos, la Filosofía de la educación deberá pertenecer a las artes. Estudiemos ahora la relación entre ambos saberes. Las artes ordenan los actos exteriores para la producción de unas determinadas obras, que son su fin. Dada la total dependencia de los actos exteriores a la razón, podemos entonces decir que las artes ordenan en realidad los actos cognoscitivos de aquel que va a realizar una obra. La virtud artística, ciertamente, no es virtud moral, sino intelectual. Este saber técnico puede adquirirse, igual que el especulativo, ya por uno mismo -inventio-, ya mediante la ayuda de un maestro -disciplina-. La Filosofía de la educación propia de este ámbito busca, precisamente, ordenar los actos del que enseña una determinada técnica, hasta conseguir que el aprendiz adquiera suficiente destreza como para valerse ya por sí mismo.

Del mismo modo que nos sucedió con anterioridad, nos encontramos ante un saber que se subordina a otro y que se requiere para la perfecta realización del segundo. Y tampoco dirigir la razón hasta la producción de una obra es lo mismo que perfecccionarla hasta la autonomía en la virtud artística; el arte y la Pedagogía técnica no trabajan bajo la misma formalidad. Ésta, no obstante, no es del todo diferente; en efecto, no enseña a conducir quien asegura a su alumno que debe cambiar de marcha sin pisar el embrague, pero sí, volviendo a un ejemplo anterior, enseña a robar adiestrando en la técnica del hurto -aunque no lo esté educando-.

Tenemos, entonces, que este saber pedagógico es parte integral, no subjetiva ni potencial, de las artes y, en concreto, del arte al que propiamente se ordene; así habrá una Pedagogía para la Medicina, otra para la Arquitectura, etc. Es muy diferente, claro está, el modo en que hay que enseñar a curar a un enfermo o a construir un edificio. De ahí, por ejemplo, que los antiguos gremios constituyeran sus propios mecanismos de formación, adaptados a sus características; el maestro preparaba al aprendiz en su particular oficio hasta que fuera capaz de trabajar por sí mismo -oficial- e, incluso, de enseñar a otros -maestro-.

EL ARTE FILOSÓFICO DE EDUCAR

Está claro que el saber pedagógico que forma parte de la Lógica o de un arte productivo puede ser considerado, en ambos casos, como un arte; y ello no por la consideración de su materialidad, es decir, en tanto que el saber pedagógico busca ordenar algo exterior al maestro, sino por la consideración del fin, que es servir de ayuda al arte de la Lógica o a un arte productivo. Por ello, el saber pedagógico ordenado a la enseñanza de la verdad especulativa es un arte según su materialidad, mas un arte especulativo y liberal según su formalidad, del mismo modo que la Lógica.

Mas en el caso de la Filosofía de la educación como parte integral de la Ética -y es ésta su significación más propia-, no podemos decir lo mismo, pues al saber moral no le conviene la razón de arte, como ya dijimos. Ahora bien, ¿le conviene de alguna manera a la Pedagogía moral, a la Filosofía de la educación propiamente dicha, la razón de arte?

La Pedagogía artística es un arte en tanto que saber integrado en un arte productivo; y de este modo está claro que la Pedagogía moral no es arte, pues forma parte integral de la Filosofía moral, como ya se demostró. Puede ser, sin embargo, que accidentalmente se pretendan en el educando ciertas destrezas como soporte de una formación moral; por ejemplo, si se enseña a practicar un deporte con ánimo de que no sólo se fortalezcan los músculos sino también la voluntad. Ello no convierte a la Pedagogía moral en arte productivo, sino al revés.

La Pedagogía especulativa, por otro lado, es un arte en tanto que saber productor de razonamientos; y de este modo está también claro que la Pedagogía moral no es arte, pues no pretende tanto llegar a conclusiones verdaderas cuanto lograr la práctica del bien. Puede ser que, también de modo accidental, se requiera demostrar al educando alguna verdad para desde ella fundamentar su educación moral; por ejemplo, razonar la existencia y obligatoriedad de la ley natural. Tampoco esto convierte a la Pedagogía moral en arte especulativo, sino al revés.

Ahora bien, la Pedagogía moral necesita ordenar la acción que el maestro dirige al educando, y ello implica la exterioridad propia de los actos ordenados por las artes. Luego podemos afirmar que en este sentido, y sólo en éste, conviene a la Pedagogía moral la razón de arte.

Tenemos, pues, que el saber pedagógico que pretende educar en la práctica del bien es, en cierto modo, un arte; aunque sólo en su consideración material, en la medida en que requiere una acción del maestro sobre el educando. Dicha acción debe alcanzar su objeto, que es precisamente el sujeto a educar, mas debe hacerlo promoviendo en él la virtud. En el primer sentido, que es el material, la acción debe ser convenientemente ordenada para que llegue de un modo eficaz al educando, y ello es lo propio del arte de educar; en el segundo sentido, sin embargo, que es el formal, la acción debe ser convenientemente ordenada para que no promueva otra cosa que la virtud, y ello es lo propio de la Pedagogía moral.

Podríamos considerar unidas las significaciones material y formal recién descritas; diríamos entonces con Maritain que estamos ante un arte moral. Si, por el contrario, las separamos tendremos que afirmar que, además de una Pedagogía moral, existe un arte pedagógico, el cual suele recibir el nombre de Metodología o, con una actitud reduccionista, el de Pedagogía.

Tres razones nos mueven a optar por una diferenciación entre ambos saberes. En primer lugar, que una acción educativa puede ser calificada tanto moral como técnicamente; así, el que enseña correctamente a robar decimos que no educa, pero sí que lo hace con destreza. La perfección moral y la perfección técnica del acto educativo pueden, pues, darse por separado, y eso es propio de actos distintos. El arte educativo implica ciertamente una moralidad, ya que todo arte es un acto voluntario y todo acto voluntario es moral; y así sucede al curar, edificar o conducir. Ahora bien, no lo es per se, dado que las artes no se ordenan esencialmente a un fin moral: "Esa es la razón de que se alabe más al artista que realiza mal la obra queriendo que al que le ocurre lo mismo sin querer". Por eso no podemos confundir la moralidad del arte educativo con la de la Pedagogía moral la cual, como ya dijimos, sí está per se ordenada a un fin moral. Y por todo ello ambos saberes los podemos ver perfectamente diferenciados.

En segundo lugar, que la significación del arte educativo sirve, además, para los otros saberes pedagógicos. Esto es así porque decir que enseñar supone una acción del maestro sobre el educando implica ponerse en la perspectiva de lo que materialmente define a la educación. Y es en lo material en lo que coinciden las tres ciencias educativas. Sucede de modo semejante a la relación entre las Ciencias naturales y la Filosofía de la Naturaleza, o entre la Lógica material y la formal, en donde el objeto material es el mismo mas no la formalidad bajo la que era considerado.

Y en tercer lugar, por encontrar en Santo Tomás una confirmación de que en una misma acción pueden diferenciarse lo moral y lo artístico. Se trata de la cuestión que dedica a las partes subjetivas de la prudencia, que es la recta razón de lo agible; cuando se pregunta si debe incluirse como especie de prudencia la militar, plantea la objeción de que lo militar es un arte y no pertenece, por tanto, a la prudencia. A ello responde lo siguiente: “Lo militar puede ser arte en cuanto tiene ciertas reglas sobre el buen uso de determinados medios externos, por ejemplo, armas, caballos, etc.; pero corresponde más a la prudencia en cuanto ordenado al bien común”. Y lo mismo podemos decir del saber educativo, tanto particular como científico. Hay una virtud artística y una ciencia artística que se ocupan de la ordenación de los aspectos materiales de la educación -libros, signos, palabras, etc.-; el fin es que el educador alcance con su acción al educando, y en esto radica la exterioridad de la acción. Así, enseñar a dirigirse a un grupo de alumnos, a utilizar medios audiovisuales, a modular la voz, etc., es arte pedagógico. Pero hay una prudencia y una ciencia moral que se ocupan de la ordenación de los actos voluntarios del educando; en este caso el acto del educando, aun su exterioridad, pasa a ser como una prolongación del acto del educador.

En definitiva, afirmamos que existe un saber interesado exclusivamente por el aspecto técnico de la educación en general, haciendo abstracción de si busca la virtud moral, especulativa o artística, y que denominamos arte pedagógico. Además, dicho arte no se indentifica con ninguna de las tres pedagogías explicadas, sino que se limita a conseguir que los actos educativos del maestro lleguen eficazmente al educando. De este modo, la Filosofía de la educación puede encontrar un buen aliado en el arte pedagógico, que colaborará en la acción perfectiva del educador para que no quede en un conjunto de meras buenas intenciones. Puede ser, ciertamente, que un padre desee guiar a su hijo hasta la cima de la virtud, mas le falten conocimientos de cómo hacerse comprender, de cómo reaccionar en determinadas edades, etc.

La ya mencionada pérdida del sentido filosófico, sobre todo moral, del saber educativo puede llevar a no diferenciar entre arte pedagógico y Filosofía de la educación; el resultado es la reducción de la Pedagogía a una mera técnica, ajena a cualquier interés moral, al conocimiento de la verdad o incluso a la adquisición de destrezas. Lo de menos será entonces la virtud a adquirir por el educando, quedando como único objeto de atención la metodología, a perfeccionar indefinidamente: se editarán impecables libros de texto, se hará uso de medios audiovisuales cada vez más sofisticados, se idearán complejos organigramas y reglamentos para los centros educativos, etc., mas todo ello perdiendo poco a poco de vista el verdadero fin, que es la virtud del educando.

lunes, 23 de agosto de 2010

Desarrollo de una filosofía personal de la educación física

Toda persona que se propone estudiar una carrera en el campo de la Educación Física necesita desarrollar una filosofía de la educación física. Esto es importante, ya que sirve de quía para las actitudes y acciones. Por ejemplo, si el juego justo es esencial para la filosofía del educador físico, entonces esta concepción filosófica habrá de permear en el comportamiento del propio maestro, en su instrucción hacia otros y en los programas que dirige.
Una filosofía personal obliga al maestro de educación física a pensar lógicamente y analíticamente y de explicar el mérito y el valor de la educación física. Con mucha frecuencia, los maestros de educación física han fallado en desarrollar filosofías definitivas personales, lo cual resulta en la pérdida de auto-dirección y prestigio de la carrera. Por consiguiente, es esencial que todo maestro de educación física formule principios, guías y direcciones a su carrera. Si el maestro no conoce hacia donde se dirige o cómo será su trayectoria en el futuro, es poco probable que se llegue a lugar deseado (cualquiera que sea ese sitio).
Es evidente que muchos de los principios de las filosofías discutidas previamente están en conflicto. Por ejemplo, el pragmatismo aboga por ayudar a los estudiantes a ser mejores miembros funcionales en la sociedad, mientras que el existencialismo se concentra en que los estudiantes sean seres auto-actualizados e independientes. A la luz de este conflicto potencial en valores y conocimientos, el maestro de educación física debe proceder lógicamente y críticamente.
 
El primer paso al formular una filosofía personal consiste en analizar y determinar las propias posturas u opiniones que posee el maestro de educación física en cuanto a lo que es la verdad, realidad y los valores. Este análisis requiere fundamentalmente una reflexión de sus experiencias previas en el campo de la educación física y deportes. Entonces, el maestro de educación física deberá utilizar como base informativa sus experiencias personales, de manera que éstas sean de ayuda al formular sus propios juicios y decisiones sobre lo que será su filosofía personal. Es posible que se requiera estudiar más a fondo estas filosofías. Además, será de gran ayuda leer sobre las filosofías de los líderes intelectuales de la educación física. Luego, compara estas filosofías con las que se observan en aquellos profesores que preparan a los estudiantes en este nuevo mundo del magisterio y en la enseñanza de la educación física. Reflexiona y especula sobre por qué las cosas tienen que ser de tal forma y si es necesario que cambie.
Muchos educadores y filósofos han adoptado un enfoque ecléctico en vez de aceptar todos los aspectos de una filosofía particular. El eclectismo representa la combinación de teorías y doctrinas derivadas de diversas filosofías para luego establecer un conjunto de creencias consistentes y compatibles. Fundamentado en las experiencias y valores personales del educador físico, una filosofía ecléctica puede surgir como los conocimientos de su propia filosofía personal. Una vez más, la clave es darse cuenta de la importancia de examinar ¿cuáles son las creencias actuales?, ¿por qué se tienen dichas creencias? y ¿qué significan los valores personales?
Sea cual sea la carrera del educador, en el segundo paso de este proceso se requiere establecer los propósitos educativos, los cuales son de un gran valor porque proveen un enfoque o dirección para las actividades subsecuentes que habrá de seguir el maestro. En otras palabras, el maestro de educación física necesita necesita determinar qué es lo que quiere lograr mientras esta consciente que cualquiera que sea la decisión, ésta debe ser lógica y consistente con la filosofía anteriormente seleccionada.
Durante el tercer paso, el maestro de educación física debe decidir las funciones de su escuela, negocio o programa según existe en la sociedad. Este proceso sigue en forma natural los propósitos generales previamente establecidos y especifica cómo estos propósitos globales pueden ser alcanzados. ¿Son los individuos o resultados el punto de enfoque? ¿Se enfatiza el proceso o el producto? Es importante que se puedan contestar estas preguntas conforme se formula la filosofía personal.
Basado en la escuela en que se habrá de trabajar, negocio o contribuciones del programa, en el cuarto paso el maestro de educación física requiere especificar prácticas y patrones de comportamiento se utilizarán como resultado de las actitudes y valores adoptados. ¿El maestro servirá como un facilitador, figura autoritaria, modelo principal o ideal a seguir, amigo, consultor o jefe? ¿Cómo se habrá de evaluar y motivar a los participantes? La esencialidad de contestar estas preguntas en armonía con la filosofía personal seleccionada no puede ser sobre enfatizada.
El quinto paso es la evaluación. Los propósitos y objetivos generales deben ser compatibles con los valores y conocimientos seleccionados. Conforme se reflexione varios aspectos de la filosofía personal del maestro, se confrontarán conflictos en las prácticas actuales o planificadas. Esto exige un cambio en la filosofía o acción para restaurar la consistencia.
Este paso debe implementarse perpetuamente a través de la carrera del maestro de educación física.
Estos cinco pasos aplican para todas las carreras en educación física, conforme el maestro desarrolle su filosofía personal. Este proceso puede comenzar ahora mismo, durante el aprendizaje sobre la filosofía y mientras se continúan ganando experiencias diarias que puedan aportar a la formulación de una filosofía personal.

Ramas de la filosofía

Dentro de la filosofía encontramos una gama amplia de subdivisiones o ramas que forman parte integral de la filosofía. Entre estas ramas filosóficas hallamos la axiología, lógica, metafísica, epistemología, ética y la estética.

Axiología

La axiología representa el estudio de la naturaleza y criterio de valores y juicios de valores en términos generales.

Examina/estudia la naturaleza de los valores. El enfoque principal (donde se concentra) de la axiología es la sociedad y sus valores. Dos extensiones de la axiología son la ética y la estética. Este estudio axiológico culmina en el desarrollo de un sistema de valores. Los valores pueden ser objetivos o subjetivos. Ejemplos de valores objetivos incluyen el bien, la verdad o la belleza, siendo finalidades ellos mismos. Por el otro lado, se consideran valores subjetivos cuando éstos representan un medio para llegar a un fin (en la mayoría de los casos caracterizados por un deseo personal). Además, los valores pueden ser fijos (permanentes) o dinámicos (cambiantes). Más aún, los valores pueden diferenciarse a base de su grado de importante y pueden ser conceptualizados en términos de una jerarquía, en la cual algunos poseen una posición más alta que otros. En resumen, la pregunta general que plantea la axiología es: ¿cómo determinar lo que tiene valor, y en qué criterio esta basado este juicio?
Aplicación para la educación física. Dentro de esta rama filosófica, los educadores físicos deben de tratar de encontrar la respuesta de la siguiente pregunta: ¿cuál es el valor de los programas de educación física al individuo?

Lógica

Comúnmente se describe como aquella ciencia basada en las leyes de la validez de inferencia y la demostración de los principios de razonamiento. Su enfoque es, pues, el razonamiento sistemático, organizado y metódico. Representa un método inteligente de razonamiento al estudiar la realidad, verdad y los valores. La lógica se encarga de examinar las ideas en una manera metódica y sistemática. Emplea un enfoque crítico para estudiar cómo las ideas se relacionan unas a otras, y aplica juicios sanos y razonables para la toma de decisiones. Por consiguiente, esta rama de la filosofía estudia la relación existente entre las ideas y describe los pasos exactos al relacionar dichas ideas. La pregunta que se hace todo estudioso de la lógica es: ¿cuál es el método de razonamiento que nos conducirá hacia la verdad?
La lógica esencialmente trabaja con los métodos de inducción y deducción. Sin embargo, éstos se han expandido en razonamiento experimental y solución de problemas para poder lograr un pensamiento reflexivo eficiente y preciso. Pretende validad estándares mediante los cuales la precisión de las ideas pueden ser evaluadas.
Aplicación para la educación física. La lógica puede ayudar a los miembros de nuestro campo a diseñar el enfoque de investigación y organizar hechos para documentar la contribución de la actividad física al bienestar. Nuestra profesión debe preguntarse: ¿qué proceso deberá emplear un investigador para poder determinar el valor de la de educación física para los participantes del programa?

Metafísica

Esta rama filosófica se relaciona con lo trascendental o supersensible y examina los principios fundamentales de la naturaleza del ser o sustancia y los tipos de existencia. La naturaleza de la realidad es su enfoque primario. En esencia, la metafísica estudia la realidad definitiva de todo. Busca establecer la realidad definitiva de la naturaleza, i.e., qué es real y qué existe. La metafísica se asocia con el ser o sustancia y estudia la naturaleza definitiva de las cosas. Toma un enfoque especulativo y realiza preguntas sobre todo lo concerniente con la humanidad. Busca las respuestas de contestaciones, tales como: ¿cuál es el significado de la existencia?, ¿qué es realidad o real?, ¿el universo tiene un significado?, ¿la realidad es monista, dualista o pluralista? Estas preguntas y aquellas similares no pueden ser contestadas por la ciencia y deben ser transmitidas hacia cada nueva generación. Cada persona tiene que considerar estas preguntas en algún momento en su vida, como seres vivientes, de manera que un ser humano es un ser metafísico con un deseo innata de buscar el significado de la naturaleza y del universo
Aplicación para la educación física. La metafísica puede emplearse para entender la relación entre mente y cuerpo o el significado esencial del deporte. Nos preguntamos: ¿qué es deporte?, ¿qué experiencias en el programa de educación física serán mejores, de manera que permitan que el individuo pueda satisfacer o alcanzar sus retos de la vida real?

Epistemología

Representa el estudio de la naturaleza del conocimiento y cómo conocer sus límites y accesar su validez. Esto quiere decir que su enfoque es la naturaleza del conocimiento y los métodos requeridos para obtener dicho conocimiento. Se encarga de examinar, pues, la naturaleza del conocimiento; en otra palabras, es la teoría del conocimiento y su adquisición. Se encuentra íntimamente vinculada con la naturaleza y el tipo de conocimiento que se puede obtener y los métodos para obtenerlo. La epistemología emplea métodos críticos y analíticos para examinar la estructura del conocimiento, su origen y sus límites. Le concierne la verdad, su origen, naturaleza y límites; de manera que, la epistemología se pregunta: ¿qué es la verdad?
Existen diferentes tipos de conocimientos. Entres éstos encontramos el conocimiento revelado por Dios, el autoritario dado por expertos, el conocimiento intuitivo obtenido por nuestra aprehensión interna, el racional adquirido a través del razonamiento y juicios válidos y el conocimiento empírico obtenido mediante la observación vía los sentidos.
Aplicación para la educación física. La epistemología nos puede ayudar a definir la naturaleza de la disciplina (i.e., un cuerpo de conocimiento) de la educación física y deporte. El futuro maestro de educación física deberá plantearse la siguiente interrogante: ¿de la siguiente pregunta: ¿cuál es el valor de los programas de educación física al individuo?

Ética

Es realmente una subdivisión de la axiología, una filosofía moral, especulativa en naturaleza, donde se examinan los valores morales. La ética es, pues, el estudio de los valores morales y estándares éticos. Su enfoque es, entonces, problemáticas de la conducta, lo malo y lo bueno. Se intenta encontrar la respuesta de la siguiente pregunta general: ¿cuál es el estándar más alto del comportamiento que cada persona debe de tratar de alcanzar? Como resultado de este razonamiento moral, es posible determinar la manera correcta de actuar (o la decisión apropiada que se debe tomar) en una situación o circunstancia dada. Esta rama de la filosofía trabaja, entonces, con la determinación de lo que es malo o bueno, con el deber y obligación moral, con la responsabilidad y los estándares del comportamiento. De esta filosofía se deriva el conocimiento de lo que es correcto e incorrecto, los códigos de la ética y el comportamiento moral. Por consiguiente, la ética estudia la naturaleza de lo que describe a un comportamiento correcto o bueno se podrá; el resultado de cada estudio es una filosofía moral. Desde la civilización Griega, los educadores han sido los responsables para el desarrollo de los estándares éticos.
La ética intenta contestar la pregunta ¿Qué es lo bueno de la vida? para la humanidad. Un sistema ético puede o no puede estar asociado con la religión. Si es así, entonces sus estándares son generalmente fijos y estáticos. Si no se orienta en términos religiosos, puede ser visualizado como ser de origen humano y determinado por las necesidades, intereses y deseos de los individuos.

La ética, como ciencia o como disciplina filosófica fue iniciada por Sócrates, quien fue el primero que teorizó sobre los conceptos morales básicos: lo bueno y la virtud, Sócrates estaba rodeado de los sofistas cuya doctrina tenia como características el escepticismo, el relativismo y subjetivismo, siendo Protágoras uno de los sofistas expresó: “el hombre es la medida de todas las cosas”; las cosas son para mí como a ti te parece que son”, estas frases aplicadas al terreno de la ética infieren que para él y los sofistas en general todos los conceptos y valores eran relativos y Sócrates no compartía esta manera de pensar, pues decía que si no se acepta la validez del conocimiento, no habrá ciencia ni moralidad porque la ciencia es la base de la moralidad, pero lo más importante para Sócrates era la virtud, a lo cual escribió “ el mayor bien del hombre es hablar de la virtud todos los días de su vida” ya que la virtud es el hábito de obrar bien, la virtud es entonces el único bien y solamente la virtud nos puede traer una felicidad perpetua e inalterable, porque la virtud siempre tiene la medida justa: nada le falta” (Séneca, citado en Martínez, 2000).

El Epicureismo esta formado por tres partes importantes: canónica, física y ética, implicadas mutuamente, para la primera se establece la diferencia entre verdad y error, respecto a la física se adquiere un conocimiento verdadero sobre la naturaleza de las cosas y por la ética el hombre alcanza la verdadera felicidad, en esta última se tiene que todo hombre es mortal y en consecuencia la felicidad debe darse en esta vida. Así la norma de moralidad es buscar el placer y evitar el dolor, siendo el fin supremo del hombre ya que el bien máximo en esta vida es la felicidad entendida como ataraxia; cuya conducta moral es que un acto humano será virtuoso o bueno si conduce al placer, el cual debe ser ético o puro, puesto que debe excluir los goces del cuerpo a las pasiones del alma, pues producen siempre dolor, esto se logra mediante la templaza; debe distinguir y superar con serenidad y valor los males inevitables, los cuales se logran mediante la fortaleza, también debe calcular qué objetos proporcionan un mínimo de dolor y un máximo de placer, en este sentido la virtud se convierte en prudencia. Así el placer máximo es aquel que exige serenidad, moderación y desprecio de deseos y temores, tal placer se da en la amistad; luego entonces el ideal ético se identifica con el del sabio, como conocedor de la naturaleza verdadera de las cosas, puede eliminar con el saber el error. Pues sólo quien busca la verdad está en camino de encontrar la felicidad o el placer. (Arnau, Brian,1988)

En el Pragmatismo solamente se admite como verdadero aquello que produce éxito en la práctica y es bueno lo que conduce eficazmente hacia el logro de un fin, sin embargo si se aceptara el pragmatismo se incurriría en contradicción, porque lo que para unos tiene éxito, para otros no. La verdad es la adecuación del pensamiento con la realidad.(Gutiérrez, 1995)

La ética Marxista consta de juicios de valoración moral como los siguientes: Dios no existe por lo tanto es absurdo fundamentar el valor moral en un ente quimérico, el hombre queda alienado y subordinado a él, suprimir esta alineación equivale a elevar al hombre a un nivel propiamente humano; el fundamento o base para distinguir lo bueno y lo malo es la fidelidad al comunismo la burguesía y los capitalistas constituyen la mancha moral de la humanidad, son los responsables de la injusticia y no merecen otra cosa, sino odio y repulsión; se proponen como ideal y mística del partido, la justicia social por lo tanto hay que darle al obrero según su capacidad y según sus necesidades, se debe luchar por una sociedad sin clase; la moral es una forma de la conciencia social, y por lo tanto depende de las relaciones económico- sociales de la época, las normas morales se encuentran condicionadas históricamente, que no hay normas eternas, cada clase social tiene sus propias normas y por supuesto impera la moral de la clase dominante, es necesario rechazar todo tipo de normas absolutas y eternas que no sean extraídas de las necesidades humanas

Estos tres modelos de ética posiblemente en su tiempo fueron aceptadas porque así se pensaba era lo mejor, pero no podemos basarnos solo en un tipo o modelo ético, según los tiempos y según nos convenga, es necesario considerar una ética personal y social basada en pos preceptos de cada uno de los estudiosos de la ética y que han trascendido a través del tiempo (Gutiérrez, 1995), a lo cual Aranguren escribe: “La ética considerada en sí misma, es primariamente personal. En cada hombre quien, desde dentro de la situación en que, en cada momento de su vida, se encuentre, ha de proyectar y decidir lo que va a hacer”, empero, si el hombre, es como nos hace ver todo el pensamiento actual, constitutivamente social ¿ cómo no había de serlo su moral? La moral ha de ser realizada en la sociedad y por la sociedad. La moral es constitutivamente social. La ética social, concebida primariamente como individual. La ética es en cuanto tal, personal y social. Lo personal y lo social son primarios en ella, e inseparables de ella” (Aranguren 1975, citado en Martínez 2000).

Hans Küng escribe “ moralmente bueno sería, pues, lo que, tanto en su dimensión individual como social, permite y posibilita a largo plazo una vida auténticamente humana: lo que posibilita un desarrollo óptimo del hombre en todos sus aspectos (también el instintivo y el de los sentimientos), y en todas sus dimensiones (incluidas sus referencias a la sociedad y a la naturaleza” (citado en Martínez, 2000)

Independientemente de las características de cada modelo ético, es necesario que el ser humano considere primeramente, la importancia que tiene de ser persona, así como la dignidad que posee esa persona, la cual debe ser respetada por el hombre mismo y los demás hombres, no importando la raza, religión, condición socioeconómica, ni intelectual, solo considerar que somos personas y que vivimos en un mundo construido por personas y como tal merecemos respeto y tolerancia; tomando en cuenta estos valores entonces el ser humano hombre se encaminará a una ética personal social, necesaria en cualquier sociedad y época. Y como escribió Sócrates las virtudes se distinguen entre dos especies: las intelectuales (ciencia, sabiduría, arte y prudencia) y las morales (prudencia, justicia, fortaleza y templanza), las segundas son consecuencia de la práctica repetida, de las acciones habituales, de la costumbre, a lo que argumentó Hegel “ la moralidad de cada persona se refleja a través de la virtud” así que para que se pueda llegar a un modelo ético es necesario practicar lo que argumentó Sócrates y Hegel, pues solo con la práctica de las virtudes se puede alcanzar, practicar, comprender y vivir la ética.

Tras integrar las diversas ciencias pedagógicas en la Filosofía moral, en la Lógica y en el conjunto de las Artes, respectivamente, parece necesario hacer nuevas precisiones. En primer lugar en referencia a la relación entre Filosofía de la educación y Ética. Esta última es la ciencia de los actos voluntarios según su ordenación al bien; y como el bien máximo del hombre es su felicidad, éste se constituye en el fin último buscado por dicho saber. La Filosofía de la educación también pretende que los actos voluntarios estén ordenados al bien, pero de un modo particular. De entrada, la atención del saber pedagógico no se dirige hacia cualquier acto voluntario, sino hacia los del educador, por los que se ayuda al educando a crecer moralmente. La materialidad del objeto de estudio de ambas ciencias no es, pues, la misma: una se ocupa de todo acto voluntario, la otra exclusivamente de los actos del educador y del educando -los cuales, por supuesto, son voluntarios-.

La delimitación más particular del objeto material de la Filosofía de la educación permitiría hacer de ésta una mera parte subjetiva de la Ética, cuyo objeto material es más genérico; sucedería como cuando hablamos de una Ética familiar, profesional o política. Mas hay que decir que también difieren en lo formal. La Ética trata, en efecto, de los actos voluntarios en su moralidad u ordenación al bien. La Filosofía de la educación lo hace, por el contrario, en su educabilidad u ordenación a satisfacer una determinada necesidad, la de llegar a ser capaz de obrar virtuosamente. Por ello no se pretende en este caso la felicidad, sino una mayoría de edad moral en la que estar bien dispuesto para ir a la zaga de aquélla.

Esta subordinación de la educabilidad a la moralidad, en la que halla sentido, permite entender sin embargo que ambas formalidades no son del todo distintas. No es, en efecto, una subordinación extrínseca, tal que la educabilidad se ordene indirectamente a lo moral. Eso sucedería si la educación fuera una mera técnica; y no es así, como luego veremos con detenimiento. Por el contrario, todo acto educativo encuentra su calificación moral en su misma finalidad, en tanto que educativo, y no sólo en cuanto que acto voluntario; y es que no se dice que alguien eduque si enseña correctamente a robar, por ejemplo. La subordinación de la educación a la vida moral es, en consecuencia, intrínseca; decir entonces que educar es, en cuanto tal, una acción moral implica en el término una analogía de proporcionalidad propia, y no de atribución extrínseca.

Por todo ello, afirmamos que el saber pedagógico no es una parte subjetiva de la Ética, pues difieren en el grado de formalidad, pero tampoco una parte potencial, al convenir proporcionalmente ambas formalidades. Dicho saber no queda de este modo fuera de la Filosofía moral, sino que es una de sus partes integrales. Éstas son, según define el Aquinate, "aquellos elementos necesarios para el acto perfecto de la misma"; y la educación es ciertamente imprescindible para la vida moral, pues "en las cosas que caen bajo el ámbito de la prudencia, nadie se basta a sí mismo". Por eso Santo Tomás considera que es parte integral de la prudencia la virtud educativa del maestro: "La prudencia, que es preceptiva, parece propia más bien de los maestros, llamados también preceptores". Y también la docilidad del discípulo: "Se da también, como hemos probado, en los súbditos a cuya prudencia corresponde la docilidad".

De la misma manera, pues, concluimos que podemos considerar a la Filosofía de la educación como una parte integral de la Ética. Tal es la importancia del saber pedagógico, sin el cual la ciencia moral adolece de uno de sus auxiliares principales, aquel que inicia al hombre en su caminar hacia la felicidad.

Aplicación para la educación y educación física. Bajo lo que estudia la ética, la reputación ha sido de interés particular y de importancia para los educadores y maestros de educación física. L desarrollo de carácter, naturaleza del juego justo y problemáticas de justicia son algunos de los intereses éticos de la educación física y deportes. ¿Cómo enseñar estándares éticos lo más efectivamente posible? ha sido un dilema de los educadores físicos y entrenadores (“coaches”) por un largo tiempo. Puesto que el juego justo y la camadería no son características inherentes de las actividades físicas, ¿cuáles son sus resultados? Cuando el juego, partidos, deportes y otras actividades físicas se involucran por la simples razones de diversión y placer, entonces no surgen problemas éticos Por el otro lado, cuando los resultados de la actividad son considerados de vital importancia, tanto así que algunos o todos los participantes empleará cualquier medio posible para loger el éxito, entonces son evidentes los comportamientos cuestionables, lo cual perjudica o afecta negativamente los valores.
La ética o valores morales no impiden la búsqueda para alcanzar una ejecutoria óptica o el desempeño máximo de la habilidades o potenciales del individuo, pero bajo esta postura se toma el riesgo de obstaculizar la determinación de lo que es bueno, la obligación de uno hacia los demás o los principios de la apropiada conducta que violen estos valores
¿Puede el maestro de Educación Física enseñar ética? A pesar de nuestro mundo materialista y pragmático, la educación física tiene la obligación de enseñar y perpetuar principios morales y éticos que son fundamentales para nuestra sociedad.
Entre estos principios encontramos:

  • La sensibilidad hacia las necesidades y diferencias individuales
  • Responsabilidad de nuestros actos, decisiones y comportamiento personal
  • El sentido de compasión y ayuda a nuestro prójimo, particularmente al necesitado
  • La honestidad
  • Integridad
  • El juego justo

Existen ciertos factores de naturaleza ética que influyen nuestra sociedad y al ambiente físico en que vivimos, de manera que, también influye al campo de la educación física y deportes. Uno se estos factores son los éticos sociales, i.e., la influencia de la política y del nacionalismo. Otro determinante son los factores ecológicos. En adición encontramos la influencia de la economía el fraude en el comercio de la salud y bienestar, la ética en el “coaching” y la influencia de la religión.
En cualquier escenario que sea, los maestros de educación física deben modelar el comportamiento ético y tratar a todo el mundo por igual, i.e., imparcialmente, de manera que otros sean impactados positivamente. Debemos estar constantemente conscientes que nuestras acciones enseñarán carácter más significativamente que nuestras declaraciones. Puesto que en la actualidad muchas características personales y de comportamiento son modeladas de un gran número de atletas destacados en deportes profesionales y colegiales, la educación física confronta un reto aún mayor. Lamentablemente, los héroes deportivos que televisados llevando a cabo actos de violencia, lenguaje abusivo y violaciones a las reglas son imitados por los niños y hasta por los adultos. El comportamiento compulsivo por la victoria y el sentido degradante que percibe durante la derrota fomenta la actitud de “ganar a toda costa.” En vez de enseñar justicia, equidad, consideraciones hacia otros y el respeto por las reglas, esta actitud comúnmente resulta en la pérdida de estándares éticos.
Los maestros de educación física tienen el reto de cambiar completamente esta tendencia negativa por la obsesión de ganar sin importar los medios. Los educadores físicos deben de dirigir sus esfuerzos hacia el logro de los valores morales más altos. Una forma de asegurar esta meta es colocándola como prioridad según el maestro de educación física desarrolle su propia filosofía. En resumen, se busca la respuesta de la siguiente pregunta fundamental: ¿cómo el deporte puede ser utilizado para desarrollar la ética?

Estética

También es una subdivisión de la axiología. Su enfoque es la naturaleza de la belleza y del arte. Trabaja, pues, con los principios de belleza y juicios vinculados con la belleza y describe y explica el fenómeno y experiencia artística. Representa el estudio de la naturaleza de la belleza en las artes, tales como la pintura, escultura, música, drama y baile. La estética, pues, estudia los valores en relación a la maneras los artistas pueden expresarse y buscan respuestas a la pregunta ¿Qué es bello o belleza?
Aplicación para la educación física. Los griegos eran entusiastas en cuanto a su apreciación de la belleza artística del cuerpo humano en movimiento. La belleza de los movimientos de alta destreza y expresión artística a través del baile nos permite observar el movimiento como una forma de arte. La pregunta fundamental que deben plantear los integrantes de la profesión de educación física y el deporte en general es: ¿por qué es admirable, artístico y de gran belleza el observar la ejecutoria del movimiento de aquellos deportistas que poseen una alta destreza motora?

Filosofías tradicionales

Las filosofías que comúnmente se estudian incluyen el esencialismo, existencialismo, experimentalismo, humanismo, idealismo, naturalismo, pragmatismo, progresismo y realismo. Un tipo de filosofía o enfoque teórico para la metodología de enseñanza de tendencia reciente es el constructivismo. Este modelo de enseñanza aplica para todas las disciplinas, incluyendo la educación física.

Esencialismo

El esencialismo representa una teoría educativa que postula que las ideas principales y destrezas son esenciales para el aprendizaje de todos los estudiantes. Este tipo de filosofía enfatiza que la enseñanza se debe realizar empleando metodologías tradicionales y disciplina.

La aplicación del esencialismo para el campo de la educación física y deportes se resume a continuación:

· Objetivo: Adaptaciones de los estudiantes al ambiente social y cultural.

· Materia de Estudio: Fundamentos del conocimiento, destrezas y valores.

· Metodología: Tradicional, enfatizando la disciplina.

· Función del Maestro: Autoritario y disciplinario.

· Función del Estudiante: Auto-disciplina, aprendido de la autoridad.

· Evaluación: Relacionada cuantitativamente con el aprendizaje de la materia a ser estudiada..

· Debilidad: No es dinámica; los estudiantes no aprenden a pensar independientemente.

Existencialismo

Representa una teoría del siglo veinte que se concentra en la existencia individual. El existencialismo postula que la verdad y los valores provienen de la experiencia de cada persona; las experiencias humanas determinan la realidad. Esta filosofía surgió en los años 1900 como una reacción contra la conformidad social. El existencialismo sojuzgaba todo al individuo, siempre y cuando se reconozca la aceptación de responsabilidad de uno mismo. Algunos filósofos existencialista pioneros incluyen a Jean-Paul Sartre y Karl Jasper.

La realidad para los existencialistas se compone de las experiencias de los humanos y dependerá de sus decisiones. Las experiencias propias o personales y las libres decisiones que uno tome resultan en la verdad y son únicas para el individuo. Es un sistema de valores individuales, mientras se encuentra controlado en su totalidad por sus decisiones, debe ser templado por un entendimiento de la responsabilidad social. Ningún valor es impuesto por la sociedad. Cada persona está libre para pensar y actuar según lo dicte sus deseos personales.

Aplicaciones educativas. La persona auto-actualizada es el resultado educativo deseado, conforme se le otorga a cada estudiante la libertad de escoger. Todos los estudiantes deben aceptar las consecuencias de sus acciones. Dentro del currículo, se le presenta a los estudiantes una variedad de actividades, particularmente aquellas individuales, a través de las cuales se desarrolla creatividad, auto-consciencia, auto-responsabilidad y la realización del la esencia individual. El maestro presenta preguntas y estimula el pensamiento reflexivo, pero permite la libertad para que los estudiantes seleccionen su propio curso de acción. En el campo de educación física, el maestro existencialista acepta la responsabilidad individual, tal como la auto-motivación al diseñar e implementar un programa personal para el desarrollo de la aptitud física. En resumen, tenemos las siguientes características de la filosofía existencialista, desde el punto de vista educativo:

· Fuente de la Verdad: Existencia humana

· Lo más Importante: El individuo

· Cómo Alcanzar la Verdad: determinación del individuo

· Importancia de la Mente: La determinación individual de la materia de estudio y el método de aprendizaje

· Importancia del Cuerpo: Libertad para seleccionar la actividad y de ser creativo

· Enfoque Curricular: Centralizado en el individuo; basado en la auto-realización

· Importancia del Maestro: Estimulador y consejero

· Importancia de la Personalidad: Aprendiendo auto-responsabilidades y conociéndose uno mismo

· Educación: Aceptar la responsabilidad individual durante la enseñanza.

· Objetivo: Ayudando a los estudiantes a ser seres auto-actualizados e independientes.

· Materia de Estudio: Amplia gama de alternativas, particularmente actividades individuales.

· Metodología: Se plantean preguntas, se fomenta el pensamiento reflexivo y los maestros estimulan la libertad de acción.

· Función del Maestro: Guía.

· Función del Estudiante: Enfocado hacia el programa para la auto-actualización.

· Evaluación: No es importante en el sentido tradicional.

· Debilidad: El énfasis exagerado en el individuo interfiere con la apropiada preparación e integración del estudiante en la sociedad

Humanismo

Una filosofía tradicional que enfatiza el valor y habilidad individual para la auto-realización mediante el razonamiento.

Desde el punto de vista educativo, podemos hablar de la enseñanza Humanística. Este tipo de instrucción posee las siguientes características:

· Objetivo: Desarrollar un ser humano crítico, íntegro, realizado

· Currículo: Basado en experiencias y situaciones directas; el conocimiento se desarrolla en un marco afectivo, de valores; responde a las necesidades e intereses del alumno.

· Metodología: Descubrimiento; método socrático; se individualizan de acuerdo a los estilos de aprendizaje

· El Aprendizaje: Se desarrolla a partir de la percepción del estudiante, en conformidad con sus experiencias y vivencias

· Función del Maestro: Facilitador del aprendizaje

· Función del Estudiante: Activo; se compromete con su aprendizaje

· Evaluación: “Assessment”; variada; permite que el estudiante se autoevalúe.

Idealismo

Es una teoría filosófica que postula que la realidad (o verdad) depende de la mente para la existencia y que la verdad es universal y absoluta. Se establece que la verdad se alcanza únicamente a través de la reflexión e intuición. Platón (civilización Griega) fue un filósofo idealista. Para el idealista, la mente representa el entendimiento crítico. Por consiguiente, la verdad surge solamente mediante el razonamiento y el proceso mental. La realidad definitiva son los ideales, valores y verdades. Esta realidades no cambian (sin importar la interpretación o decisiones, sean correctas o incorrectas), son universales y externas El individuo es importante/centro. Debe ser atendido por medio de la mente y su proceso. Esta conceptualización idealista confluye con la educación física. Debido a que la realidad es espiritual y no física, en ocasiones la actividad física pasa un segundo nivel de prioridad. Según la filosofía idealista, la mente y el cuerpo se desarrollan mutuamente.

Aplicaciones educativas. El objetivo de la filosofía idealista es el desarrollo de la persona como un todo/integral, según aplica en la Educación Física. Debido a que el currículo se enfoca en ideas, los maestros, los cuales son más importantes que el proceso, están libres para utilizar cualquier método que pueda ayudar a los estudiantes alcanzar su nivel de personalidad óptimo y desarrollo del carácter. Este tipo de filosofía aplica muy bien bajo los objetivos de naturaleza afectiva. Como resultado del dominio afectivo, encontramos la creatividad, deportividad (compartir en forma cortes y justo durante la intervención deportiva). Estos representan valores que enfatiza el idealismo.

En síntesis, el idealismo puede describirse a base de las siguientes características:

  • Fuente de la Verdad: Ideas
  • Lo más Importante: La gente
  • Cómo Alcanzar la Verdad: Razonamiento e intuición
  • Importancia de la Mente: Enfatizada
  • Importancia del Cuerpo: Desarrollado simultáneamente con la mente
  • Enfoque Curricular: Centralizado en el maestro a través de ejemplos para los estudiantes; cualitativo
  • Importancia del Maestro: Un modelo y ejemplo
  • Importancia de la Personalidad: Se enfatizan los valores morales y espirituales
  • Educación: Auto-desarrollada
  • Objetivo: Desarrollo de la personalidad y la mente
  • Materia de Estudio: Suprema importancia
  • Metodología: Conferncia, preguntas y respuestas, discusiones
  • Función del Maestro: Más importante que el proceso
  • Función del Estudiante: Desarrollo de la persona co,o un todo
  • Evaluación: Subjetivo, cualitativo estudiada.
  • Debilidad: Resistencia al cambio; el desarrollo de lo físico posee una prioridad secundaria en comparación con el desarrollo de lo intelectual/mente

Naturalismo

Representa una creencia que las leyes científicas de la naturaleza gobierna la vida y que las metas individuales son más importantes que las metas sociales. El naturalista cree en cosas que existen dentro del reino físico de la naturaleza, la cual es por si sola la fuente de valor. Se enfatiza que el individuo es más importante que la sociedad.

Aplicaciones educativas. La educación se enfoca en satisfacer las necesidades de cada estudiante. Declara la importancia de la enseñanza individualizada a través de la auto-educación y auto-actividad. Desde el punto de vista de la educación física, la exploración de las propias capacidades e intereses conducen directamente a mayores destrezas y ajustes de la naturaleza. Las actividades no competitivas, de equipo, individuales y al aire libre proveen oportunidades de juego que benefician a los estudiantes en términos físicos, psicológicos y sociales. Mediante las actividades físicas el individuo desarrolla su bienestar total. Un escenario natural provee un ambiente de aprendizaje excelente para el desarrollo de las destrezas sociales, intelectuales y físicas.

Jacques Rousseau fue un filósofo naturalista. Éste fomentaba que la educación debe utilizar el mundo físico como el salón de clase. Los maestros mediante el ejemplo deben guiar los estudiantes a través del razonamiento inductivo para derivar sus propias conclusiones. Las leyes de la naturaleza dictan al maestro y al estudiante los patrones lógicos de crecimiento, desarrollo y aprendizaje. La filosofía de Rousseau tiene repercusiones positivas en el campo de la educación física y deportes. Sabemos que se fomentaba la educación de la mente y el cuerpo simultáneamente. Esto implica que el bienestar físico mejora el apresto (la buena disposición) para aprender destrezas mentales, morales y sociales; por ejemplo, “Windsurfing”.

En resumen, las aplicaciones educativas del naturalismo se caracterizan por lo siguiente:

· Fuente de la Verdad: Naturaleza

· Lo más Importante: El individuo

· Cómo Alcanzar la Verdad: Leyes de la naturaleza

· Importancia de la Mente: Balance físico y mental para la persona como un todo

· Importancia del Cuerpo: La actividad física es esencial para el aprendizaje óptimo

· Enfoque Curricular: Disponibilidad individual para el aprendizaje

· Importancia del Maestro: Guía y ayudante

· Importancia de la Personalidad: Desarrollo de destrezas sociales es también importante

· Educación: Procesos naturales

· Objetivo: Desarrollo de la persona como un todo

· Materia de Estudio: Juego; actividad individual auto-dirigida

· Metodología: Informal: solución de problemas

· Función del Maestro: Guía; la naturaleza enseña

· Función del Estudiante: El estudiante aprende a su paso; aprendizaje individualizado

· Evaluación: Basado en las metas individuales alcanzadas

· Debilidad: Una educación muy simple para un mundo complejo

Pragmatismo

Es una filosofía del movimiento americano enfatizando la realidad como la suma de cada experiencia individual a través de la experimentación práctica. Postula que las experiencias, no los ideales ni realidades, proveen la clave para encontrar la verdad. Para el filósofo pragmático la realidad definitiva se alcanza mediante su experiencia, debe ser experimentada. Además, la realidad no es absoluta. Más aún, la realidad es dinámica y cambia constantemente, debido a que las circunstancias y situaciones varían continuamente de persona en persona. Se intenta encontrar aquella verdad que trabaja en una situación dada. La verdad es una función de las consecuencias del tiempo y depende del contexto social. En el pragmatismo se enfatizan las responsabilidades sociales. Los valores resultan de juicios de las propias experiencias, siempre y cuando se evalúen en términos de lo que le conviene al grupo, no egoístamente.

Aplicaciones educativas. El objetivo general de la educación pragmática es el desarrollo de la eficiencia social en los estudiantes (Dewey, 1996). Los estudiantes necesitan tener oportunidades o experiencia en situaciones de solución de problemas de la vida y aprender cómo ser unos miembros productivos de la sociedad. La filosofía educativa enfatizada en el pragmatismo se concentra en el estudiante. Para estos propósitos, e diseñan actividades de solución de problemas pertinentes a la vida diaria del aprendiz. En otras palabras, la educación pragmática se enfoca a las necesidades e intereses de los estudiantes. En adición, fomenta la aplicación del método científico y estimula que el estudiante experimente una gran variedad de actividades. Existen también aplicaciones para la educación física y deportes. Por ejemplo, para los deportes de equipo, esta filosofía enfatiza la cooperación y el desarrollo de destrezas interpersonales. Por el otro lado, en las actividades de movimiento, se proveen oportunidades para explorar una gran variedad de experiencias que emplean la solución de problemas. Más aún, la participación en una variedad de actividades, tales como una combinación de patinaje sobre ruedas y “frisbee” pueden ayudar al individuo funcionar más efectivamente en la sociedad.

En resumen:

  • Fuente de la Verdad: Experiencias humanas
  • Lo más Importante: La sociedad
  • Cómo Alcanzar la Verdad: Experimentando cambios
  • Importancia de la Mente: Aprendiendo mediante el inquirir, observación y participación
  • Importancia del Cuerpo: Variedad de actividades para el funcionamiento efectivo en la sociedad
  • Enfoque Curricular: Centralizado en el niño; basado en diferencias individuales
  • Importancia del Maestro: Motivador, especialmente a través de actividades para la solución de problemas; co-aprendiz
  • Importancia de la Personalidad: Desarrollo de destrezas sociales y satisfacer nuestras propias necesidades
  • Educación: Para eficiencia social
  • Objetivo: Ayudar a los estudiantes a ser miembros útiles y efectivos de la sociedad
  • Materia de Estudio: Experiencias de una amplia variedad de actividades
  • Metodología: Solución de problemas
  • Función del Maestro: Guía
  • Función del Estudiante: Enfocado al programa para aprender sobre valores morales propios
  • Evaluación: Subjetivo y auto-evaluativo
  • Debilidad: Falta de metas fijas para darle estabilidad y dirección a los estudiantes

Progresismo

El progresismo representa una teoría que aplica el pragmatismo a la educación al enfocarse en el niño individual en vez del asunto a ser estudiado, informalidad en los procedimientos dentro del salón de clase y solución de problemas. En forma sintetizada, tanto para la educación como para la educación física, el progresismo posee las siguientes aplicaciones:

· Objetivo: Estimula a los estudiantes a experimentar y obtener experiencias a través de procesos democráticos

· Materia de Estudio: Seleccionado por los estudiantes

· Metodología: Enfoque centralizado en los niños (solución de problemas)

· Función del Maestro: Guía tolerante y facilitador

· Función del Estudiante: Enfocado en el programa

· Evaluación: Individualizada

· Debilidad: No enfatiza en la materia de estudio; muy tolerante

Realismo

Es aquel pensamiento filosófico que se fundamenta en la creencia de las leyes y el orden del mundo según se manifiesta por la ciencia independiente de la experiencia humana. Aristóteles (de Grecia) fue un filósofo realista clásico. Esta filosofía contradice a los seguidores del idealismo. Dentro de la conceptualización realista, se encuentra en control las leyes de la naturaleza (en vez de las verdades existentes). Para el filósofo realista, la verdad se alcanza mediante el método científico. Las investigaciones científicas examinan las cosas materiales del mundo durante la búsqueda de la verdad. Por consiguiente, el método científico le provee al realista el proceso para adquirir y aplicar la verdad, i.e, conocimiento que se origina en el mundo físico pero emerge a través de la experimentación.

Aplicaciones educativas. En la filosofía realista, la función de la educación es adiestrar al estudiante para que pueda descubrir e interpretar las cosas reales de la vida, de manera que se puedan asegurar ajustes del individuo en el mundo real. El aprendizaje se concentra en el individuo, en vez de en el maestro. El currículo incluye actividades y experiencias que permiten a los estudiantes entender las leyes del mundo físico. Las metodologías educativas fundamentales empleadas son el razonamiento inductivo, uso extenso de sesiones de ejercicios de práctica y la evaluación objetiva.

Este tipo de filosofía también posee aplicaciones de importancia para el campo de la educación física y deportes. Puesto que el énfasis es en el individuo como un todo o una sola unidad, la educación física posee una función (aportación) importante; contribuye a los objetivos tradicionales de la aptitud orgánica, desarrollo neuromuscular, habilidad intelectual, desarrollo social y desarrollo emocional. Como fue mencionado previamente, el realismo postula que la verdad se obtiene empleando el método científico, lo cual tiene implicaciones directas para la investigación en las diferentes sub-disciplinas de la educación física. Por ejemplo, en el campo de las ciencias del ejercicio, se observa la integración e implementación del método científico en las investigaciones científicas relacionadas con el estudio estrictamente controlado sobre la prescripción de ejercicio.

En resumen se describe a continuación las características principales del realismo y sus aplicaciones para la educación, educación física y deportes:

  • Fuente de la Verdad: Realidad científica
  • Lo más Importante: Mundo físico
  • Cómo Alcanzar la Verdad: Método científico
  • Importancia de la Mente: Poderes del razonamiento y uso de método científico
  • Importancia del Cuerpo: Énfasis en el cuerpo como un todo
  • Enfoque Curricular: Concentrado en el asunto; cuantitativo
  • Importancia del Maestro: Presentación de hechos en forma ordenada; uso de ejercicios de prácticas y el método científico
  • Importancia de la Personalidad: Se aprende para adaptarse a la vida
  • Educación: Para satisfacer las realidades de la vida
  • Objetivo: Preparar a los estudiantes a encarar efectivamente las realidades de la vida
  • Materia de Estudio: Requerida y el énfasis en el aprendizaje
  • Metodología: Empleo de ejercicios de práctica, conferencias y proyectos de la vida real
  • Función del Maestro: Selecciona el conocimiento que debe ser aprendido
  • Función del Estudiante: Enfatiza al individuo como un todo
  • Evaluación: Cuantitativa, empleando medios científicos
  • Debilidad: Una visión muy escueta/limitada; todo debe de ajustarse a las leyes naturales, de lo contrario sería incorrecto

Constructivismo

No existe una definición única y definitiva de lo que el constructivismo. Hay que entender sus características y su meta principal. A continuación habremos de plantear diversas conceptualizaciones de lo que es el constructivismo. Entonces, el constructivismo puede describirse como una posición filosófica que postula que la realidad o el conocimiento es creado por el propio individuo, fundamentado de experiencias personales previas y del conocimiento actual. Se enfatiza que la construcción interna del conocimiento se lleva a cabo principalmente a través de un aprendizaje activo por parte del estudiante. Otra manera de visualizar el constructivismo es como una teoría acerca del conocimiento y del aprendizaje que considera que el mundo es un proceso activo. Además, se puede describir como una perspectiva que enfatiza la participación activa de la persona que aprende para comprender y dar sentido a la información. Más aún, representa un movimiento pedagógico donde el estudiante construye su nuevo conocimiento a base del conocimiento inicial o de experiencias previas o nuevas. El constructivismo afirma que el conocimiento es algo que es creado por cada individuo, fundamentado de las experiencias personales y del conocimiento actual que posee el estudiante. Conforme la gente experimenta algo nuevo ellos internalizan esta con experiencias o construcción del conocimiento previamente establecido. Por consiguiente, bajo este tipo de enfoque filosófico y educativo, el aprendizaje representa la construcción interna del conocimiento.

El modelo constructivista cuenta con las siguientes premisas:

· Ideas previas sobre los conceptos o fenómeno.

· Participación activa en la construcción del conocimiento.

· El individuo posee la capacidad cognitiva para construir su conocimiento activamente.

· Las experiencias individuales y el conocimiento actual proveen las bases para descubrir o construir el conocimiento del individuo.

· Las experiencias de aprendizaje son relevantes a la vida real del los alumnos.

· Las actividades educativas son medios sociales que ayudan a la construcción de esquemas conceptuales.

· Los maestros son simples facilitadores del aprendizaje.

Aprendizaje por descubrimiento. Esta modalidad se encuentra dentro de la filosofía constructivista. Bajo esta metodología de enseñanza, se presentan actividades de solución de problemas mediante las cuales los alumnos descubren los principios básicos. Durante las experiencias en el salón de clase enfocado en el aprendizaje por descubrimiento, debe haber una interacción y retrocomunicación constante entre el maestro y los estudiantes. En este ambiente, el estudiante trabaja mediante las siguientes acciones:

· Ofrece posibles soluciones o respuestas.

· Trata explicaciones alternas y logra conclusiones como evidencia.

· Hace preguntas relacionadas que fomenten investigaciones futuras.

· Tienen mucha interacción y discute las alternativas con otros compañeros.

· Consulta con sus compañeros para entender.

· Utiliza la información previa para preguntar, proponer posibles soluciones y toma de decisiones o juicios.

El maestro también posee unas funciones vitales durante las actividades de descubrimiento, tales como:

· Realiza preguntas de importancia y relevantes necesaria para que los estudiantes puedan inferir conceptos.

· Provee tiempo para que los estudiantes trabajen actividades para la solución de problemas.

· Permite que los estudiantes hagan preguntas divergentes y creativas.

· Los estudiantes pueden evaluar su propio aprendizaje.

· Fomenta que los estudiantes interpreten y describan los conceptos desde el punto de vista del alumno.

Teoría educativa cognoscitiva - metacognición. Se refiere a la relación entre la estructura del conocimiento, su significado y cómo se aplica.

Fundadores del constructivismo - raíces intelectuales. El modelo constructivista representa una recopilación de diversas posturas filosóficas y educativas que han sido planteadas a través del tiempo, tales como:

· Sócrates, Platón y Aristóteles (470-320 B.C.)

· San Agustín (354-430 A. D.)

· John Lock (1632-1704)

· Jean Piaget

· Lev Semenovich Vygotsky

· Psicólogos de la Gestalt

· F. C. Bartlett (1932).

· Jerome Brunner

· John Dewey

Bases teóricas del constructivismo. El constructivismo se fundamenta bajo tres vertientes teóricas, a saber, la sociológica (realidad social), la filosófica (el valor de los significados) y la psicológica (interacción).

Las características educativas del constructivismo se resumen a continuación:

· Objetivo: Construir el conocimiento

· Materia de Estudio: Variada

· Metodología: Solución de problemas, aprendizaje cooperativo y colaborativo; preguntas abiertas y análisis reflexivo; investigación.

· Currículo: Basado en el desarrollo de conceptos; adaptado a las necesidades de los estudiantes.

· Producto: Aplicación del conocimiento

· Aprendizaje: Activo, fundamentado en experiencias.

· Conocimiento: El estudiante desarrolla conceptos mediante actividades significantes activas (experiencias).

· Función del Maestro: Facilitador; proveer experiencias estimulantes y relevantes a la vida diaria. Busca divergencia y puntos de vista en los estudiantes

· Función del Estudiante: Es activo, inquisidor, cuestiona, analiza, evalúa, toma decisiones.; construcción; pensar, interpretar, cuestionar y explicar; participar en forma activa en la sociedad.

· Evaluación: "Assessment" auténtico, en contexto con la realidad del estudiante y de la materia de estudio.

Fomentando la creatividad. La creatividad es una virtud que debe ser desarrollada en cada estudiante. Para estos propósitos, se recomienda estimular el pensamiento divergente, aceptar el desacuerdo, alentar a que los estudiantes crean en sus decisiones y juicios, instruir a los estudiantes que todos poseen la capacidad de ser creativos y motivar en los estudiantes el pensamiento creativo.

Guías/principios del constructivismo. Según Brooks & Brooks (1993, pp. 21-22), en un escenario educativo constructivista se evidencian las siguientes acciones:

· Se establece la relevancia del nuevo conocimiento al emplear un enfoque exposición a problemas.

· El conocimiento se estructura alrededor de conceptos principales en recogen la esencia de las ideas y conocimiento.

· Siempre se trata de buscar y dar importancia a las posturas, juicios o interpretaciones que toman los estudiantes.

· El currículo se adapta para que se tomen en consideración las posiciones de los estudiantes.

· Durante el proceso evaluativo de los estudiantes, se aplican técnicas de “assessment”, fundamentado en el contexto de la enseñanza.

Actividades de aprendizaje -solución de problemas. Una de las metodologías de enseñanza fundamentales que deben implementarse en las actividades o experiencias exploradoras del aprendizaje es la solución de problemas. La solución de problemas fomenta el pensamiento reflexivo y crítico dentro de un aprendizaje activo. Para que sea efectivo, se recomienda que el maestro aplique las siguientes sugerencias:

· Inicialmente la actividad debe ser accesible para todos los estudiantes.

· Estimular a los estudiantes que realicen juicios y tomen decisiones.

· Fomentar preguntas divergentes y que cuestionen lo establecido.

· Enfatizar que los estudiantes empleen sus propios métodos para encontrar la verdad.

· Promocionar la discusión y comunicación entre los estudiantes y el maestro.

· Que tenga un fin o dirección.

· Incorporar un elemento de sorpresa.

· Que sea divertida.

Aprendizaje activo - la pregunta. Para que sea posible un aprendizaje activo, la pregunta es esencial. No obstante, el maestro tiene que tener mucho cuidado de cómo redactarla e implementarla dentro de situaciones reales y de aplicación para la realidad del estudiante. Se recomienda la siguiente:

· No realizar una pregunta de lo que ya conocen los estudiantes

· Se sugiere no aceptar respuesta que sean de: “Sí” ó “No”.

· Se debe evitar re-frasear una pregunta.

· Esperar el tiempo suficiente para que los estudiantes puedan pensar y contestar la pregunta solicitada.

· Tratar de no evaluar las respuestas.

Características de la enseñanza constructivista. En los siguientes párrafos se habrá de discutir una diversidad de características que posee toda actividad de aprendizaje de naturaleza constructivista. Es importante que todo maestro que quiera realmente transformar su salón de clase en un ambiente de aprendizaje activo y por descubrimiento, sea fiel en los siguientes postulados que describen al maestro y estudiante constructivista.

Dentro de las experiencias de aprendizaje constructivista, se fomenta, acepta y respeta opiniones, creencias, actitudes y posiciones divergentes del estudiante. Se le considera como un ser independiente y autónomo. Además, se motiva a los alumnos a ser líderes. Se deben respetar los diversos talentos y modos de aprender. No obstante, enfatiza en que los estudiantes expresen claramente sus ideas. Cuando esto ocurre, el maestro puede asegurarse que realmente ocurrió un proceso de aprendizaje.

En el modelo constructivista, se estimula la interacción, discusión y el diálogo reflexivo entre los alumnos y con el maestro. Se fomenta el contacto entre los estudiantes y el maestro. En este ambiente, el maestro provee retroalimentación inmediata ante las interrogantes de sus alumnos. Además, se desarrolla la reciprocidad y cooperación entre los estudiantes. El maestro, entonces, permite respuestas y reacciones de los estudiantes.

En el aula de clase, existe un ambiente académico que permite que las respuestas de los estudiantes ante preguntas de reflexión guíen la clase, alteren las estrategias de enseñanza previamente establecidas y cambien el contenido de la lección.

Al realizar preguntas, el maestro constructivista permite un tiempo razonable para que éstas se puedan reflexionar e interpretar. Claro, las preguntas deben de fomentar el pensamiento reflexivo y ser del tipo abiertas. Siguiendo esta línea de pensamiento, el maestro constructivista con frecuencia formula preguntas que desarrollen el pensamiento crítico, reflexivo y los procesos de inquirir, particularmente las abiertas, de diferentes niveles de pensamiento. Además, permite y estimula que los estudiantes hagan este tipo de pregunta.

De gran importancia son los tipos experiencias de aprendizaje que el maestro integra en su ambiente educativo. Algo importante es se debe exponer a los alumnos a experiencias académicas que puedan crear cuestionamientos sobre las concepciones previas de su conocimiento actual. Además, es imperante provee actividades y experiencias prácticas en el escenario educativo y motivar a los estudiantes para que utilicen dichas experiencias, sus experiencias previas y conocimiento actual para descubrir conceptos (construir su conocimiento), para el entendimiento conceptual y para la solución de problemas. Más aún, las actividades de aprendizaje deben ser relevantes, reales, divertidas, tiene un fin pedagógico y utilizan ejemplos o situaciones de la vida cotidiana de los estudiantes. En otras palabras, se considera el contexto actual del aprendizaje al desarrollar estas actividades. Como producto, las experiencias derivadas de las actividades de aprendizaje deberán permitir a los estudiantes retar hipótesis establecidas previamente y como resultado se genera una discusión del grupo. Relacionado con las experiencias de aprendizaje, el maestro constructivista aplica en su sala de clase una variedad de estrategias de enseñanza, tales como el aprendizaje cooperativo y colaborativo, solución de problemas, solución de problemas, actividades interactivas, trabajo cooperativa y colaborativo, análisis y diálogo reflexivo, dialéctica, estudio de casos, exploración conceptual, entre otros. Además, se emplea terminología (cognitiva) apropiada, tales como clasificar, analizar y crear durante actividades de aprendizaje innovadoras.

Como fue mencionado en párrafos anteriores, la creatividad es fundamental en un ambiente constructivista, de manera que se debe tratar que los estudiantes sean creativos. Claro, se requieren implementar ciertas estrategias pedagógicas para éstos propósitos. Además, es importante fomentar la curiosidad natural del estudiante, el pensamiento divergente y el aprendizaje de inquirir. Por lo tanto, en un escenario constructivista se propicia el desarrollo de destrezas de pensamiento superiores. Además, se aboga que el estudiante piense sobre sus propios procesos de aprendizaje.

El maestro constructivista comúnmente emplea una variedad de fuentes y recursos educativos, tales como diferentes libros, revistas, periódicos, internet/Web, programas multimedios interactivos en CD-ROM, entrevistas personales. La clase utiliza datos sin analizar (brutos o crudos), fuentes primarias, manipulativos, materiales físicos e interactivos que son comunes en la vida diaria del alumno. El maestro debe ser creativo y emplear estos recursos que sean de bajo costo, i.e, que se puedan obtener de materiales que diariamente se utilizan en la vida real en que todos vivimos.

De suma importancia es el método evaluativo que habrá de implementar el maestro. En una clase de naturaleza constructivista se utiliza una diversidad de técnicas de “assessment”. La evaluación del aprendizaje se fundamenta en la ejecutoria y entendimiento del alumno. Este proceso de “assessment” se lleva a cabo en el contexto de la enseñanza.

El énfasis se concentra en el alumno en vez de en el maestro. El estudiante es el que interacciona con eventos sociales, con otras personas, de manera que pueda obtener una mejor comprensión de dichos eventos. Por consiguiente, lo más importante es el aprendizaje del alumno.

Durante la enseñanza, se toma en consideración los modelos neurobiológicos del aprendizaje que provienen de las investigaciones científicas en el campo de la neurociencia. Bajo esta premisa, el maestro constructivista considera la forma en que el alumno aprende los conceptos.

El maestro constructivista colabora con otros maestros para relacionar e integrar otras asignaturas o disciplinas en su clase. Un maestro constructivista promueve la concientización de que los estudiantes son responsables de su aprendizaje. El aprendizaje se fundamenta en la enseñanza de conceptos fundamentales y esenciales, particularmente aquellos que se aplique a la vida real del alumno.